Reporte de la CFPB Halla que Prestamistas Agregan Tarifas y Términos Confusos a Préstamos para Energía Solar
- English
- Español
La agencia publicó consejos a todos los consumidores del país sobre el crédito depredador para energía solar
WASHINGTON, D.C. – La Oficina para la Protección Financiera del Consumidor (CFPB, por sus siglas en inglés), emitió un reporte destacado (en inglés) donde revela que algunos prestamistas de préstamos para energía solar residencial están engañando a los propietarios acerca de los términos y costos de sus préstamos, mintiendo acerca del ahorro que producirán en gastos de energía, y están agregando tarifas en los saldos de los prestatarios. El reporte describe cómo estas tarifas aumentan los costos de los préstamos en un 30% o más, por encima del costo en efectivo, además, los prestamistas frecuentemente mienten sobre el impacto fiscal de la instalación de energía solar.
“Por culpa del calor sofocante que tuvimos en todo el país durante el verano, muchas familias están instalando paneles solares para enfriar sus viviendas”, dijo el director de la CFPB, Rohit Chopra. “La CFPB está vigilando de cerca a los prestamistas para energía solar, para asegurarnos de que no “quemen” a la gente”, continuó.
El mercado de sistemas de energía solar continúa creciendo rápidamente, y ha virado hacia comunidades menos afluentes. En el año 2023, la energía solar representó el 55% de la nueva capacidad de generación electricidad agregada a la red del país, un crecimiento importante desde 23% que representó en el 2018. El crecimiento se debe en parte a abaratamiento de los costos de los paneles solares y al aumento de los incentivos gubernamentales, entre ellos, los créditos fiscales. El costo promedio de instalar energía solar residencial es de $25.000, y los créditos fiscales federales en este momento cubren el 30% del mismo.
En el año 2023, ochenta y cinco por ciento de estos proyectos solares fueron pagados a través de préstamos, y por ello, el número de prestamistas existentes se ha incrementado. Frecuentemente, estos prestamistas se asocian con instaladores de energía solar, y emplean una variedad de tácticas de mercadeo y de ventas de puerta a puerta, para convencer a los propietarios de que firmen contratos de financiamiento.
La CFPB descubrió en el mercado, que el rápido crecimiento del número de asociaciones entre prestamistas no bancarios y vendedores de sistemas de energía solar también estaba elevando el potencial de que existan conductas ilegales y de que haya consumidores perjudicados en el mismo. Al contrario de lo que sucede con los préstamos automotrices o hipotecarios, en los cuales los consumidores saben que quieren un auto o una vivienda, y entonces buscan financiamiento para ello, los vendedores puerta a puerta están yendo directamente a los propietarios tratando de convencerles de que no solamente, compren sistemas de energía solar, sino de que además lo hagan a través de un préstamo con su compañía. Dentro de este esquema de ventas y crédito, los propietarios han descubierto que han sido embaucados y engañados para que tomaran contratos que tenían capitales inflados, pagos globales mensuales, y que ofrecían ahorros en electricidad más bajos que los prometidos.
La CFPB ha identificado cuatro áreas específicas de riesgo:
- Tarifas escondidas sobre las ganancias: Los prestamistas esconden tarifas en sus préstamos, agregándolas a los capitales de los mismos. Estas “dealer fees” o tarifas del vendedor, frecuentemente aumentan el costo del préstamo en un 30% o más, por encima de lo que contaría el proyecto solar en efectivo. Los prestamistas frecuentemente incluyen estas tarifas en el capital del préstamo, sin incluirlas en la tasa anual porcentual (APR, por sus siglas en inglés) establecida. Los prestamistas casi nunca separan claramente estos márgenes del precio total que, de otra forma, pagarían los consumidores por la instalación del sistema.
- Declaraciones engañosas sobre cuánto pagarían los consumidores: Aunque no está garantizado que se reciba un crédito fiscal y que el mismo depende de numerosos factores, muchos discursos de ventas lo promueven como el 30% de “Crédito fiscal de inversión” federal para la instalación de sistemas solares residenciales. De hecho, los prestamistas presentan capitales de sus préstamos como “costo neto”, asumiendo que recibirán el crédito fiscal. Los consumidores podrían terminar creyendo que el crédito fiscal será restado del “costo neto”, o que el “costo neto” es lo que pagarán, independientemente de que califiquen y reciban el crédito fiscal.
- Pagos globales mensuales: Los términos de los préstamos podrían exigir prepagos sustanciales en fechas específicas, los cuales equivaldrían al crédito fiscal esperado. Si un consumidor no califica para recibir el crédito fiscal, podría terminar perdiendo lo prepagado, o teniendo que hacer pagos mensuales sustancialmente más altos.
- Promesas de ahorros exagerados: Los propietarios han reportado que les han afirmado que los paneles solares cubrirían los costos financieros y que eliminarían futuras facturas por electricidad. Aunque esto podría ocurrirles a algunos propietarios, los beneficios financieros de los proyectos solares son inciertos y podrían variar significativamente, dependiendo de la ubicación geográfica y la temporada del año.
Conjuntamente al reporte publicado, la CFPB emitió consejos para el consumidor advirtiéndoles a los propietarios de las prácticas riesgosas usadas en el mercado del crédito para energía solar, y aconsejando a los prestamistas que han encontrado actividad ilegal. El Departamento del Tesoro también ha publicado información para ayudar a los consumidores a buscar el sistema de energía solar que más les convenga. Estas agencias trabajarán conjuntamente a la Comisión Federal de Comercio y otras entidades federales asociadas, para abordar los abusos cometidos dentro de este importante mercado.
Lea el reporte publicado (en inglés)
Este esfuerzo complementa otros trabajos efectuados por la CFPB para proteger a las familias en todo lo relacionado con el financiamiento de la energía limpia. El pasado año, la CFPB propuso normativa (en inglés) para enfrentar los abusos cometidos en préstamos otorgados bajo la Ley para la Evaluación de Propiedades para Energía Limpia (PACE, por sus siglas en inglés). La CFPB está actualmente trabajando para finalizar esta normativa.
Los consumidores pueden enviar sus quejas sobre productos y servicios financieros en la página de la CFPB, o llamando al (855) 411-CFPB (2372).
Aquellos empleados que crean que las compañías donde trabajan han violado leyes de protección financiera al consumidor, pueden enviar la información que tengan a la dirección whistleblower@cfpb.gov.
La Oficina para la Protección Financiera del Consumidor es una agencia del siglo 21 que implementa y hace cumplir las leyes federales en materia financiera, y que se asegura de los mercados de productos financieros sean justos, transparentes y competitivos. Para encontrar más información visite consumerfinance.gov/es.