Compré un vehículo usado y lo financié con el concesionario. Me dijeron que el vehículo estaba en buenas condiciones, pero resultó tener serios problemas mecánicos. El concesionario dice que la garantía no cubre ninguno de los problemas. No puedo realizar el pago de mi préstamo y también arreglar el vehículo. ¿Qué puedo hacer?
Hay leyes federales y estatales que pueden protegerle en esta situación. Por ejemplo, algunos estados cuentan con leyes para vehículos defectuosos (lemon laws) que sirven para que le devuelvan el dinero de un vehículo que no siempre cumple con las normas de calidad y rendimiento.
Sus opciones varían según sus circunstancias particulares. Para mayor información, comuníquese con el fiscal general del estado (en inglés) o con la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés).